A TACLEARLO

SI ALGUIEN mira al Secretario de Hacienda, Arturito Fuentes Vélez, por favor tacleélo como en el futbol americano. Es que, el funcionario estatal, el hacedor de los hoyos negros de las finanzas públicas, le hace al occiso. Entra a su oficina por la puerta trasera, no sale, dice que se halla en reuniones de zoom y, en fin, busca por todos los medios no dar explicaciones. Fuentes Vélez amerita dar info sobre la retención de cuotas de la engrosada burocracia estatal y sobre la sobretasa de impuestos que debiera haber entregado a Fechac y Ficosec. Ya le miran en todos lados con su pijama de rayas, pero hay que darle chansa de hablar. Su conducta, cierto, podría incurrir en numerosos tipos penales, pues no es un juego pervertir las reglas en el manejo de los recursos públicos. La rigidez de las normas presupuestales proviene de una larguísima batalla ciudadana contra la arbitrariedad y el abuso de poder. No en balde, como bien puede verse ahora, se peleó para que los gobiernos ejercieran los recursos públicos en obras y acciones programadas previamente y no a lo tarugo como parece haber sido la norma en esta administración.