El harbano Bazán

Por Osbaldo Salvador Ang.- No hagan apuestas con el Diputado Omar Bazán porque luego no paga y construye pretextos para evadir.

El suscrito le apostó una comida con vino Petrus a que no incluirían un candidato del PRI al Senado en la fórmula de cada Estado como él aseguraba.

Es obvio que le gané la apuesta.

Pero, como buen apostador, dio largas y largas al pago, hasta que se fijó fecha y hora, en el Restaurante Epoca, del Distrito Uno, para liquidar el adeudo.

Cuando le pedí al mesero una botella de vino Petrus, a éste se le pegó el miedo en la cara, fue a la barra y regresó con una tablet donde aparecen las botellas y sus precios.

El Petrus más barato costaba 198 mil pesos.

El harbano Omar Bazán sintió, al escuchar al mesero, que se le iba el cuerpo del alma y bajó la cabeza.

-¿En qué pensaste cuándo apostabas? –le pregunté.

-En ganar- me dijo el muy gracioso.

Ni hablar. Comimos con coca cola Zero. No sabía a nada el platillo, pero no tenía caso alegar.

La conclusión fue ésa: no apostarle nada a Omar Bazán porque no hospeda en su pecho el orgullo de los árabes que dicen que deudas de juego son deudas de honor.

Y lo digo desde aquí, porque éste es mi pódium.