La Fuente Móvil

LA CRÍTICA

  • Por Editor R
LA CRÍTICA

Fue ruda la Magistrada Myriam Hernández con la Fiscalía. Lisa y llanamente, dijo que la Juez Nora Espino liberó a los siete sicarios detenidos en Ojinaga por las deficiencias y la falta de preparación de los MPs. Eso fue como derramar ácido sobre una esponja, la verdad de las cosas. Habrá que ver qué responde El Fiscal César Jáuregui o Heliodoro Araiza sobre el tema pero la cosa se puso al rojo vivo. Nadie quiere un escenario de descoordinación ni de desconcierto en el tema de la seguridad. Entre todos deben sellar con un buen silicón político las fugas jurídicas para evitar más casos como ése. Todos pierden como en la pirinola y más la sociedad que mira con desesperación cómo se le cae de las manos la lucha contra el crimen organizado. De la Fiscalía se dice que tardaron en consignar y que no demostraron que los detenidos estaban en posesión de las armas homicidas al momento de los hechos. De la Jueza se especula que en ese tipo de situaciones impera la ley de la plata o del plomo.